El presente ensayo pretende invitar a la reflexión y, tal vez, a la búsqueda de respuestas a ciertas interrogantes que planteo, desde mi perspectiva de maestra con 25 años de experiencia en escuelas y liceos del país, y con actualización permanente en diversas áreas del quehacer educativo, lo cual me permite articular las propuestas y metas que propenden hacia un cambio cualitativo en el tema de Educación, específicamente en referencia a las políticas de equidad y calidad educativa.
Mi punto de partida es el reconocimiento del contexto favorable
de la Reforma actual, sobre todo en relación a la reforma curricular; su consonancia con las demandas globales de una educación más justa y de mejor calidad y, lo que ocurre al interior de nuestra práctica docente, no con un afán acusatorio, sino más bien analítico y optimista, en busca de respuestas que nos permitan derribar los obstáculos que, en muchos casos, son generados por nosotros mismos, o por modelos de gestión, más bien cerrados, que han demorado en reconocer las demandas de un cambio a nivel global y que van entorpeciendo la carrera diaria hacia las metas más nobles de nuestro quehacer como educadores.
La Reforma tras una meta universal
Introducción:
La actual Reforma Educativa Chilena a fin de lograr los estándares de equidad y calidad, ha implementado una serie de políticas que han permitido un despliegue enorme de recursos financieros y humanos a favor de los Liceos llamados “vulnerables”.Logra la descentralización administrativa de la educación pública y también fomenta la ayuda estatal a los colegios particulares. El Magisterio logra la adscripción a un estatuto propio, fortaleciendo la calidad profesional. Nunca antes se había contado con un sistema de evaluación tanto del sistema como de los establecimientos y de los logros en términos de aprendizajes. Cuenta con recursos financieros, materiales y técnicos, y avanza renovándose permanentemente hacia la consolidación de las necesidades de la llamada “sociedad del conocimiento”.
Comparada con las Reformas anteriores, ésta ha logrado avances insoslayables en términos de cobertura, pero no ha superado la brecha de la desigualdad, es decir, no se evidencian fuertes logros en términos de equidad y calidad en nuestro sistema educativo. Cabe mencionar al respecto que la falta de conciencia política en términos de equidad no es atribuible solo a nivel nacional o local, sino como lo comenta Rosales a propósito del informe de CEPAL: “América Latina continúa siendo (…) la región más inequitativa del mundo, con la mayor desigualdad en el reparto de los ingresos y en la distribución de la riqueza”. (Rosales: 2003
II. DESARROLLO
A) RESISTENCIA AL CAMBIO:
Creo que uno de los peores obstáculos en la consecución de las metas referidas a la calidad de enseñanza radica en la desinformación –intencionada o no_ del cuerpo docente, ya que se sintió postergado, sin acceso a opinión o réplica. Este fue un tema obligado en cada curso de perfeccionamiento fundamental al que he asistido. Muchos docentes le restaron importancia a los cursos de PPF, que tenían por finalidad adentrarnos en el tema de
B CALIDAD DOCENTE:
“No se concibe un sistema educativo de calidad, si el mismo no incluye programas de equidad con una atención diferenciada, que de respuestas a las necesidades que presentan los alumnos.” Citado por el autor Rosales en relación a
La diferencia de enfoque hacia el quehacer educativo, en relación a estrategias pedagógicas y de evaluación de los aprendizajes entre una y otra generación de profesores es ostensible, como lo es la disparidad de criterios en términos de objetivos transversales. Cabe preguntarse, entonces, si algunas de las Instituciones a cargo de la formación docente están restringiendo su malla curricular, o simplemente no han logrado una debida acreditación. No olvidemos que el sistema de evaluación docente considera el apoyo a los profesores que se inician en la docencia, lo que demuestra, a lo menos, una falta de seguridad en las condiciones en que actualmente egresan los docentes. Si somos cuidadosos, no se debería encasillar como incompetente sólo a
Sumado a lo anterior, en la mayoría de los Establecimientos no se ofertó un currículo motivador para los educandos, seguramente por razones administrativas se estimó la carga horaria en función de la disponibilidad de tiempo del profesorado y no en función del mandato curricular vigente, ni menos en función de los intereses y habilidades de los alumnos. En consecuencia, hubo más de lo mismo, y fueron ellos los que alzaron la voz en mayo de 2006 para decirnos: ¡Exigimos una Educación de Calidad!
C) LOS SÚPER PROFESORES:
¿Qué está ocurriendo con nuestra profesión? ¿Por qué se ha llegado a la instancia de Planes de Superación Profesional?
Tal vez nos sentimos sobre exigidos, cansados. Pasamos más horas en establecimientos, a veces poco cómodos, más horas frente a aula, con alumnos cada vez menos motivados, con problemas graves, como ocurre con los jóvenes en condiciones vulnerables, que poco apoyo tienen de sus familias. Sin embargo, atendemos, escuchamos, orientamos, lidiamos con los problemas de aprendizaje porque no todos nos especializamos, no todos somos psicopedagogos; no somos médicos, ni psicólogos, pero hacemos lo que podemos para atender necesidades de competencia de otros profesionales, y de los padres, pero padres ausentes. Nos falta tiempo y las exigencias administrativas son muchas. Cuando se hablaba en futuro aún de
D) ENFRENTAR EL CAMBIO:
No obstante esta visión, si se quiere un tanto pesimista, ocurre que las actuales demandas de
“La formación del profesorado (tanto en su etapa inicial como en activo) y la incorporación creativa, responsable, solidaria de nuevas tecnologías en todos los niveles y modalidades de la enseñanza, reforzarán la calidad y la equidad de la educación”. (Rosales: 2003)
Mientras tanto, creo que debemos seguir inspirados en el espíritu renovador y prospectivo de las políticas ministeriales, pero debemos estar atentos y ser más participativos para recoger verdaderamente lo esencial, lo que necesariamente debemos poner en práctica en las aulas a fin de motivar a nuestros educandos para que asuman un rol protagónico, participativo donde seamos unos preparados mediadores del aprendizaje que ellos requieran, según sus peculiares características e intereses. Esto pasa por una abnegada preocupación por nuestro desempeño, por un honesto reconocimiento de nuestras debilidades y de la expresión auténtica de nuestras fortalezas como educadores.
E) NO ESTAMOS SOLOS:
Lo que no hay que olvidar es que no estamos aislados: mejorar la equidad y la calidad de la educación es una preocupación a nivel mundial, generada en el conocimiento de las reales necesidades de nuestros pueblos. Sería recomendable revisar Proyectos y Programas de Política Educativa, realizados a nivel mundial, como el Proyecto Principal de Educación en América Latina y El Caribe 1981,
“
De conformidad con lo anterior, habría que revisar el resultado de políticas implementadas, a nivel nacional a fin de subir los estándares de calidad y los resultados efectivos del aprendizaje, y reorientarlas cuando fuere necesario. Por ejemplo, me pregunto cuáles fueron los reales aportes al mejoramiento de la calidad de Educación en aquellos Liceos donde un buen número de docentes cursó pasantía en el extranjero ¿Se crearon los espacios necesarios para que los docentes replicaran sus nuevas experiencias y aportaran a la transformación de la cultura tradicional o local al interior de
F)AÚN ES TIEMPO:
Tomemos un tiempo para reflexionar sobre nuestra práctica. Reconquistemos espacios para hablar de nuestro quehacer, pero con altura de miras para reconocer nuestras debilidades, y, una de ellas es encasillarnos en el asignaturismo. Es un grave error que practicamos porque estando aislados en nuestra “parcela” no damos entrada a nuevas formas de hacer, nos abrazamos a la comodidad, es decir, a la entrega de información y conocimientos de la manera más rudimentaria, como dice Sepúlveda, a propósito de su propuesta del “Aprendizaje Expansivo”, enseñanza de primer o segundo nivel. Al respecto, es interesante la postura de Edgard Morin al referirse a la disyunción entre las humanidades y las ciencias y la separación de éstas en disciplinas hiper especializadas: “…las mentes formadas por las disciplinas pierden sus aptitudes naturales para contextualizar los saberes tanto como para integrarlos en sus conjuntos naturales. El debilitamiento de la percepción de lo global conduce al debilitamiento de la responsabilidad (cada uno tiende a responsabilizarse solamente de su tarea especializada) y al debilitamiento de la solidaridad (ya nadie siente vínculos con sus conciudadanos)” Morin: 1999
En consonancia con las exigencias de
III.CONCLUSIÓN:
Se nos han presentado oportunidades inmejorables de cambio cualitativo en Educación, gracias a la implementación y ejecución de políticas educativas que se han centrado específicamente en las siguientes áreas: Programa de Mejoramiento de
Creo que este tema es por demás interesante.
Lo que no puedo dejar de mencionar es que una generación de profesores que hoy frisamos los 50 años, nos hemos involucrado positivamente en el quehacer pedagógico. Tuvimos la suerte de contar con maestros que nos formaron sólidamente en el ámbito de
Hoy por hoy, las oportunidades de acceso al Perfeccionamiento se han multiplicado, ojalá sean muchos más los colegas interesados en estos nuevos tiempos.
Profesora :ANA SAN MARTÍN BERNAL
No hay comentarios:
Publicar un comentario